En 1924 ingresa al Seminario de Guadalajara, con carácter de externo, en 1933 el Sr. José Garibi Rivera le confiere el subdiaconado, partiendo el mismo año a la ciudad Roma, para ingresar al Colegio Pío Latino, su ordenación sacerdotal fue en 1934, habiendo oficiado el Excmo. Sr. Guiseppe Palica, Obispo Auxiliar de Roma. Tiene contacto con el destacado historiador Pedro Leturia S.J., quien lo dirige e impulsa a adentrarse en el campo de los estudios de la historia.
Obtiene el Doctorado en Historia Eclesiástica en la Universidad Gregoriana de Roma, realizando viajes de investigación y estudios complementarios por el viejo mundo, situación que le motiva a dedicarse al tema de las relaciones de México y el Vaticano.
En 1937 regresa a la capital jalisciense, como Vicario de la Parroquia de Mexicaltzingo, a la vez que dicta las cátedras de Historia de la Iglesia, Historia Universal e Historia de México en el Seminario de Guadalajara y luego imparte Derecho Patrio en la Universidad Autónoma de Guadalajara.
Ingresa en la benemérita Sociedad de Geografía y Estadística de Jalisco.
En 1942 al morir su padre, inicia los estudios e investigaciones para actualizar su obra iniciada a principios de siglo sobre la historia de San Miguel el Alto logrando más tarde la tercera Edición.
En 1943, funda la revista "Estudios Históricos", que dirigió en su primera época, misma que se ve concluida hasa el año de 1946.
En 1945 conjuntamente con un destacado grupo de jaliscienses, funda en Centro de Estudios Históricos Fray Antonio Tello, sólida institución que continua hasta nuestros días desarrollando una importante labor en su campo.
Después de 14 años de ser sacerdote secular, decide ingresar a la Compañía de Jesús en 1948, viéndose lógicamente en la obligación de iniciar otra vez como novicio. Vivió en San Cayetano en el Estado de México y más tarde en San Angel ya en el Distrito Federal, donde debió estudiar nuevamente filosofía por más de dos años.

En 1953 es enviado a los Estados Unidos para impartir las cátedras de Historia Eclesiástica, Historia de México e Historia Universal en el Seminario Interdiosesano de Montezuma, en el estado de Nuevo México, donde permanece hasta 1969.
Durante su estancia en la Unión Americana realizó estudios complementarios de Teología, impartió Economía Social y fue Encargado Responsable de el Secretariado Social. Desempeñó el cargo de Bibliotecario del Seminario por más de seis años y se dio a la tarea de escibir la Historia del Seminario de Montezuma, voluminosa obra publicada en dos tomos, viéndose en la necesidad de realizar diversos viajes de estudios e investigación, visitando Chicago, Baltimore y la ciudad de Washington donde permaneció por tres meses, concluyendo más tarde sus investigaciones en la capital mexicana.

En 1969 regresa a a ciudad de México, donde desarrolla una intensa actividad tanto en el campo religioso como en el periodístico, ya que escribió profundos artículos sobre justicia social, buscando crear conciencia ciudadana en favor de los pobres y desprotegidos de nuestro país, colaborando en la sección vespertina del periódico capitalino "El Sol de México" a la vez que para un gran número de diarios de diversos estados de la República, miembros de la muy amplia Cadena García Valseca, ahora denominada: Organización Editorial Mexicana.

Es miembro fundador de la Sociendad Eclesiástica Mexicana y se integró al Centro de Estudios Guadalupanos A.C. de la que llegó a ser Presidente, dedicando grandes esfuerzos al estudio de los antecedentes biográficos de Juan Diego, para enriquecer y vigorizar la causa de su posible canonización.

En 1972, viaja nuevamente a la ciudad de Roma, para proseguir con sus investigaciones históricas en el Archivo Vaticano y otras importantes funtes, mismas que le permitieron concluir sus esfuerzos y publicar así el segundo tomo de las Relaciones de México y el Vaticano. También se da a la tarea de investigar y estudiar los antecedentes históriccos del propio Colegio Pío Latino, de la ciudad de Roma, conjuntando material suficiente para publicar más tarde la historia del Colegio Pío Latina Americano en 1979 por la editorial JUS.
Se incorpora a la Academia Mexicana de la Historia y al Instituto Cultural Dávila Garibi.

En 1976, regresa en forma definitiva a la capital de Jalisco, radicando en la Ciudad de los Niños del Padre Cuéllar.
En 1977 inicia la tecera época de la revista "Estudios Históricos". reanudando también las actividades del Centro de Estudios Históricos Fray Antonio Tello. donde participaban destacadas personalidades como: Lic. Fernán Gabriel Santoscoy Faudón, Jesús Toscano, Ing. Ricardo Lancaster Joes, José Cornejo Franco, el padre José de Jesús Jiménez, José Muro Ríos, Sra. Paulina Carvajal, José Sandoval Godoy, Dr. Fernando Robles así como Don Enrique Varela entre otros muchos personajes. Teniendo como sedes iniciales la casa del Dr. Rafael Medina Ascensio y la del Profesor José Ramírez Flores, luego en la Canaco, posteriormente en la Galería Torres Boder y en la Galeria de Arte Moderno de 1977 a 1991, más tarde en la Sociedad de Geografía y Estadística, la Casa Museo López Portillo y finalmente en el Museo de la Ciudad, su actual sede.

En 1993, La Cámara Nacional de Comercio de Guadalajara y el Instituto Cultural Dávila Garibi, le brindaron un homenaje con motivo de el Cincuenta Aniversario de la fundación de la revista "Estudios Hustóricos".

En 1994 la benemérita Sociedad de Geografía y Estadística de Jalisco y el Colegio de Jalisco, conjuntamente le organizaron un magno Homenaje en Zapopan Jal. a iniciativa de sus presidentes el Sr. Enrique Varela, quien siempre fue un importante factor de apoyo en todos los proyectos del Padre Medina y Don José Maria Muriá así como el destacado historiador Jaime Olveda.

El Doctor Luis Medina Ascensio S.J. falleció el 25 de Septiembre de 1998 en la ciudad de Guadalajara. El periódico El Informador, publicó en 17 de Enero de 1999 nu amplio reportaje sobre el destacado historiador, reconociéndolo como un "Tapatío ejemplar".

La Asociación de Cronistas Municipales del Estado de Jalisco le organizó un Homenaje Póstumo el 6 de Noviembre de 1998, en el Museo de la Ciudad, sieno su presidente el Sr. Pedro Vargas Avalos, quien le recordó como: "un crisol del espíritu y la historia" concluyendo con unas palabras del propio Padre Medina.

"Los seres humanos debemos ser libres de pensamiento y palabra, pero como parte de la sociedad, debemos mantener la unión en lo necesario y actuar con generosidad invariable"

NOTA: Extracto de los textos del Lic. Fernán Gabriel Santoscoy Faudón y del Sr. Luis Sandoval Godoy, así como de artículos publicados por el Periódico el Informador del 17 de Enero de 1999, El Occidental el 8 de Noviembre de 1998 y la edición conmemorativa de la revista "Estudios Históricos" 1993, proporcionados por la hemeroteca del Dr. Rafael Medina Ascensio.